Decidí que al llegar a la ciudad había que
explorar la escena musical de Bergen, el primer lugar que visité fue el mítico
Bar Apollon, abierto en 1976. Al llegar al lugar se notaba el ambiente del típico lugar donde los lugareños van por un par de cervezas a pasar un buen rato. Me recibió
David Bowie en los altavoces y ya con pinta de draft noruega en mano me dediqué a escuchar el buen rock variado y disfrutar de la
gran selección de cervezas locales y extranjeras a relativo buen precio (para el, por lo demás, altísimo promedio de Bergen). Una pinta de cerveza de barril cuesta aproximadamente 70 NOK, alrededor de 9 dólares. En la tienda también se pueden comprar
LP’s de grupos de rock de todos los tiempos.
Al día siguiente visité el
Club Garage, dicen que este bar es usualmente
frecuentado por los músicos de metal locales, no tuve la suerte de ver a ninguno ese día en particular. En términos de precios el bar es bastante amigable, Pinta de draft a 62 NOK y la sidra inglesa Bulmers, muy solicitada por acá, a 86 NOK.
El
sótano del bar cuenta con un
área para conciertos y esa noche tocaban dos grupos locales. El primer grupo fue
Razorbats. Desde los primeros riffs me enganchó su estilo
punk melódico de los 90´s, me trajo a la mente discos como Against the Grain y No Control de Bad Religion, ciertos
cortes de hard rock terminaban de dar la identidad a la música de razorbats. La energía en tarima y la conexión con el público fue excelente desde el inicio, pude corear los fáciles estribillos y a pesar de la evidente barrera del lenguaje en las interacciones con el público
gritaba como cualquier otro local. Personalmente recomiendo su segundo y más reciente disco: Razorbats II.